La Secretaría de Bienestar Social de la Municipalidad de Goya, a través del área de Salud, informa sobre las consecuencias que pueden aparejan para los seres humanos las altas temperaturas y los golpes de calor. Al mismo tiempo brinda una serie de consejos para esta temporada estival, a fin de evitar las graves consecuencias de las insolaciones.
Los niños tienen los mecanismos de termorregulación menos desarrollados, y responden peor a las temperaturas extremas. Por otro lado, no reclaman muchas veces el agua que necesitan o no saben expresarse. Supone especialmente un peligro en esas condiciones de calor extremo dejar los niños encerrados en el coche.
Los ancianos pueden presentar un golpe de calor con mayor facilidad al tener más deteriorados los mecanismos de defensa frente a la hipertermia y deshidratarse más rápidamente.
PERSONAS CON UN MAYOR RIESGO DE SUFRIR UN GOLPE DE CALOR
- Ancianos y niños, con una peor tolerancia a los cambios térmicos.
- Personas con un nivel de conciencia reducido o un deterioro de sus funciones cognitivas.
- Personas que sufren alcoholismo y otros hábitos tóxicos.
- Personas desnutridas o con procesos crónicos debilitantes.
¿SE PUEDE PREVENIR EL GOLPE DE CALOR?
La prevención se basa en evitar la exposición al sol cuando son muy altas temperaturas ambiente (olas de calor, sobre todo en las horas de mayor intensidad del sol) y la humedad relativa (por encima del 60 o 70%). Especial cuidado debemos tener con los niños y ancianos.
Conviene tener siempre a mano una botella de agua si salimos a pasear con niños, administrando una cantidad regular (al menos 1500 a 2000 ml. Al día). Durante la práctica de cualquier deporte debemos reponer cierta cantidad de líquido, al menos unos 250 ml. cada treinta minutos (alterando bebidas isotónicas y agua).
QUE DEBE HACERSE FRENTE A UN GOLPE DE CALOR
Si se produce insolación, conviene consultar a un servicio médico lo antes posible, trasladando a la persona afectada a un lugar más frío.
Es conveniente color a la persona afectada tumbada en el selo y alejada de las altas temperaturas, y comenzar a corregir el déficit de agua que se haya prodcido.
Para ello se le debe administrar agua que irá bebiendo repetidamente aunque sean cantidades pequeñas. Es conveniente intentar bajar la temperatura mojando la piel y aplicando paños mojados y fríos en la frente, nuca y axilas, recurriendo a sistemas de ventilación o incluso sumergiendo a la persona con hipertermia en una bañera con agua fría. Es aconsejable administrar algún antitérmico.
SUGERENCIAS
Es aconsejable seguir las sugerencias médicas para evitar los efectos que produce en el cuerpo la ola de calor.
El golpe de calor es la más grave de las enfermedades provocadas por las temperaturas altas y se produce cuando el cuerpo pierde la capacidad de controlar su temperatura a través de la sudoración. Entonces, puede subir a los 41 grados en un lapso de apenas 10 a 15 minutos.
Los síntomas son: fiebre de más de 39 grados, piel enrojecida, caliente y sin sudor, pulso rápido y fuerte, dolor de cabeza palpitante, mareo y náuseas.
Para evitar esos problemas, se aconseja tomar bebidas frías pero no alcohólicas ni con cafeína. También descansar, ducharse y si es posible buscar un lugar con aire acondicionado, como un centro comercial.
También se sugiere vestir ropa ligera y de colores claros. En lo posible mantenerse en interiores durante las horas más calurosas del día y no realizar actividades extenuantes.
También se advierte sobre la necesidad de visitar a los adultos de edad avanzada, al menos dos veces por día para observar si presentan síntomas de agotamiento. Y observar a los bebés y niños con mucha frecuencia.
Los niños tienen los mecanismos de termorregulación menos desarrollados, y responden peor a las temperaturas extremas. Por otro lado, no reclaman muchas veces el agua que necesitan o no saben expresarse. Supone especialmente un peligro en esas condiciones de calor extremo dejar los niños encerrados en el coche.
Los ancianos pueden presentar un golpe de calor con mayor facilidad al tener más deteriorados los mecanismos de defensa frente a la hipertermia y deshidratarse más rápidamente.
PERSONAS CON UN MAYOR RIESGO DE SUFRIR UN GOLPE DE CALOR
- Ancianos y niños, con una peor tolerancia a los cambios térmicos.
- Personas con un nivel de conciencia reducido o un deterioro de sus funciones cognitivas.
- Personas que sufren alcoholismo y otros hábitos tóxicos.
- Personas desnutridas o con procesos crónicos debilitantes.
¿SE PUEDE PREVENIR EL GOLPE DE CALOR?
La prevención se basa en evitar la exposición al sol cuando son muy altas temperaturas ambiente (olas de calor, sobre todo en las horas de mayor intensidad del sol) y la humedad relativa (por encima del 60 o 70%). Especial cuidado debemos tener con los niños y ancianos.
Conviene tener siempre a mano una botella de agua si salimos a pasear con niños, administrando una cantidad regular (al menos 1500 a 2000 ml. Al día). Durante la práctica de cualquier deporte debemos reponer cierta cantidad de líquido, al menos unos 250 ml. cada treinta minutos (alterando bebidas isotónicas y agua).
QUE DEBE HACERSE FRENTE A UN GOLPE DE CALOR
Si se produce insolación, conviene consultar a un servicio médico lo antes posible, trasladando a la persona afectada a un lugar más frío.
Es conveniente color a la persona afectada tumbada en el selo y alejada de las altas temperaturas, y comenzar a corregir el déficit de agua que se haya prodcido.
Para ello se le debe administrar agua que irá bebiendo repetidamente aunque sean cantidades pequeñas. Es conveniente intentar bajar la temperatura mojando la piel y aplicando paños mojados y fríos en la frente, nuca y axilas, recurriendo a sistemas de ventilación o incluso sumergiendo a la persona con hipertermia en una bañera con agua fría. Es aconsejable administrar algún antitérmico.
SUGERENCIAS
Es aconsejable seguir las sugerencias médicas para evitar los efectos que produce en el cuerpo la ola de calor.
El golpe de calor es la más grave de las enfermedades provocadas por las temperaturas altas y se produce cuando el cuerpo pierde la capacidad de controlar su temperatura a través de la sudoración. Entonces, puede subir a los 41 grados en un lapso de apenas 10 a 15 minutos.
Los síntomas son: fiebre de más de 39 grados, piel enrojecida, caliente y sin sudor, pulso rápido y fuerte, dolor de cabeza palpitante, mareo y náuseas.
Para evitar esos problemas, se aconseja tomar bebidas frías pero no alcohólicas ni con cafeína. También descansar, ducharse y si es posible buscar un lugar con aire acondicionado, como un centro comercial.
También se sugiere vestir ropa ligera y de colores claros. En lo posible mantenerse en interiores durante las horas más calurosas del día y no realizar actividades extenuantes.
También se advierte sobre la necesidad de visitar a los adultos de edad avanzada, al menos dos veces por día para observar si presentan síntomas de agotamiento. Y observar a los bebés y niños con mucha frecuencia.
